Credito abierto con garantia hipotecaria

Credito abierto con garantia hipotecaria

significado de la hipoteca abierta

El invierno suele ser la época del año en la que los consumidores recurren más a sus tarjetas de crédito. Las compras navideñas, los proyectos de mejora del hogar, las reparaciones del coche… son gastos importantes para el consumidor medio. Sin embargo, la mayoría no se lo piensa dos veces a la hora de cargarlo todo en una tarjeta de crédito de alto interés.

Quizá pienses: “Los puntos de recompensa hacen que merezca la pena pagar con una tarjeta de crédito”. Pues bien, según creditcards.com, el tipo de interés medio de las tarjetas de crédito es del 17,21%. A menos que planees pagar todo el saldo de una vez, podrías ser golpeado con cientos o incluso miles de dólares en intereses al año. No hay ningún programa de recompensas que elimine el dolor de las deudas de las tarjetas de crédito.

Supongamos que has vivido en tu casa actual durante varios años. Una hipoteca abierta le permite acceder al capital de su casa y utilizar los fondos según sea necesario. Si le aprueban, podrá pedir prestados fondos adicionales sobre el mismo importe del préstamo hasta un límite establecido por el prestamista. Tenga en cuenta que su límite de préstamo depende del valor de su vivienda y del importe de su primera hipoteca.

ejemplo de préstamo abierto

Una hipoteca abierta le permite pedir prestado dinero adicional sobre el mismo préstamo en una fecha posterior. Una hipoteca abierta combina algunas cualidades de una hipoteca tradicional con algunas características de una línea de crédito con garantía hipotecaria, o HELOC. Le permite convertir el valor del patrimonio neto de su vivienda en dinero en efectivo aumentando posteriormente el saldo original de su préstamo. Si necesita una orientación práctica para saber cómo una hipoteca abierta puede influir en su vida financiera en general, considere la posibilidad de buscar un asesor financiero que se adapte a sus necesidades particulares.

Una hipoteca abierta le proporciona una suma global que se utiliza para comprar la vivienda. Pero la hipoteca abierta es para algo más que el importe de la compra. El prestatario puede recurrir a esta capacidad de endeudamiento adicional más adelante, cuando lo necesite. En ese sentido, es similar a un HELOC.

A diferencia de la HELOC, que es un segundo gravamen sobre la vivienda, la hipoteca abierta sólo requiere la constitución de una hipoteca. Además, la HELOC le permite recurrir a la línea de crédito en cualquier momento que la necesite. Una hipoteca abierta puede restringir el tiempo durante el cual puede retirar los fondos.

wikipedia

Para el consumidor medio, el mundo de los préstamos, las hipotecas y la financiación puede resultar confuso y estresante. Como agente, es importante entender la diferencia entre los distintos tipos de crédito y sus préstamos asociados para poder asesorar a sus prestatarios sobre el mejor camino hacia la propiedad de una vivienda.

El crédito cerrado es un tipo de préstamo en el que el prestatario recibe la suma por adelantado y debe devolver el préstamo al final de un plazo determinado. El importe adeudado incluye también los intereses o las comisiones de mantenimiento devengadas a lo largo de la duración. Los créditos cerrados permiten prestar una gran suma de dinero de una sola vez.

La mayoría de las hipotecas son préstamos garantizados y requieren una garantía. Para actuar como garantía, o como garantía de que los deudores devolverán el préstamo en su totalidad, el prestatario aceptará poner algo de valor que posea para perderlo si incumple el contrato. En el caso de un préstamo hipotecario, esta garantía es la propia vivienda. Otros tipos de garantía pueden ser un coche, una suma invertida en una cuenta de ahorros o un certificado de depósito (CD). Con la garantía como forma de seguro añadida a la transacción, el prestamista puede permitirse ofrecer tipos y comisiones menos agresivos, aunque esto conlleva mucho más riesgo para el prestatario. Una buena puntuación de crédito es menos necesaria con un préstamo garantizado, aunque la garantía es absolutamente necesaria.

hipoteca abierta frente a hipoteca cerrada

En función de las necesidades, un particular o una empresa pueden suscribir un crédito abierto o cerrado. La diferencia entre estos dos tipos de crédito radica principalmente en las condiciones de la deuda y en su amortización.

El crédito cerrado incluye instrumentos de deuda que se adquieren para un fin concreto y un plazo determinado. Al final de un periodo determinado, el individuo o la empresa debe pagar la totalidad del préstamo, incluidos los pagos de intereses o las comisiones de mantenimiento.

Los tipos más comunes de instrumentos de crédito cerrados son las hipotecas y los préstamos para automóviles. Ambos son préstamos contratados por un periodo específico, durante el cual el consumidor debe realizar pagos regulares. En este tipo de préstamos, al financiar un bien, la entidad emisora suele retener algunos derechos de propiedad sobre el mismo, como medio de garantizar su devolución. Por ejemplo, si un cliente no devuelve un préstamo para la compra de un automóvil, el banco puede embargar el vehículo como compensación por el impago.

El crédito abierto no está restringido a un uso específico. Las cuentas de tarjetas de crédito, las líneas de crédito con garantía hipotecaria (HELOC) y las tarjetas de débito son ejemplos comunes de créditos abiertos (aunque algunos, como el HELOC, tienen períodos de reembolso finitos). El banco emisor permite al consumidor utilizar los fondos prestados a cambio de la promesa de reembolsar cualquier deuda en el momento oportuno.

  Liquidacion de inmuebles hipotecados por los bancos

porErnesto Villalba Gutiérrez

Ernesto Villalba Gutiérrez, asesor financiero.